La sauna seca se calienta con leña o energía eléctrica y está revestida en madera. La temperatura dentro del sauna seco oscila entre los 70-100 °C y la humedad es mínima, nunca superior al 20%.
Para aprovechar al máximo los beneficios de la sauna seca, se recomienda:
Hidratarse adecuadamente antes y después de la sesión.
Practicar la respiración profunda durante las sesiones.
Alternar calor y frío después de la sesión.
Descansar después de la sesión y permitir que el cuerpo se enfríe naturalmente.
Los jjimjilbang, o baños públicos coreanos, ofrecen una variedad de beneficios, entre los que se encuentran:
Bienestar físico: El calor de las saunas ayuda a relajar los músculos y articulaciones, y a disminuir el dolor. También aumenta la serotonina, una hormona que se relaciona con el bienestar y el sueño.
Belleza: El calor de las saunas aumenta la circulación, lo que hace que la piel luzca radiante.
Conexión social: Los jjimjilbang son lugares donde amigos y familiares pueden pasar tiempo juntos, reforzando el vínculo social.
Desintoxicación: Los jjimjilbang son lugares para desintoxicarse y sudar.
Masaje: En algunos jjimjilbang se puede masajear el cuerpo para liberar el Qi.
Los jjimjilbang son una práctica milenaria, por lo que están abiertos a personas de todas las edades. Sin embargo, no son recomendables para personas mayores o para aquellas que sufren del corazón, tienen diabetes, y alta o baja presión
La sauna húmeda,, es un tipo de sauna que se caracteriza por tener una humedad relativa del 100% y una temperatura que no suele superar los 70° C. El calor húmedo se produce mediante la generación de vapor de agua, lo que envuelve al usuario en un ambiente que puede brindar diversos beneficios para la salud:
Mejora la circulación sanguínea
Alivia el dolor muscular y articular
Reduce el estrés y mejora el bienestar mental
Limpia la piel profundamente
Mejora el sistema respiratorio
Ayuda a eliminar toxinas
Reduce la presión arterial
Un jacuzzi de agua fría puede tener muchos beneficios para la salud y el bienestar, entre ellos:
Mejora la salud cardiovascular
Puede ayudar a mejorar la presión arterial y la sensibilidad a la insulina.
Reduce la inflamación
Puede ayudar a reducir la hinchazón de los tejidos y controlar la inflamación.
Alivia el dolor
Puede ayudar a aliviar el dolor de la artritis y el dolor muscular después del ejercicio.
Mejora la inmunidad
Puede ayudar a mejorar la inmunidad al estimular la formación de glóbulos rojos.
Mejora la salud mental
Puede ayudar a aliviar el estrés y mejorar el estado de ánimo.
Mejora la circulación
Puede ayudar a reactivar la circulación del cuerpo y mejorar el recorrido de la sangre.
Mejora la piel
Puede ayudar a descongestionar y desinflar la piel del cuerpo y del rostro.
Mejora el cabello
Puede ayudar a mejorar las condiciones del cuero cabelludo y darle más fuerza y brillo.
Mejora el rendimiento deportivo
Puede ayudar a mejorar el rendimiento deportivo cuando se hace en un clima más cálido o húmedo.
Los jacuzzis calientes pueden tener muchos beneficios para la salud, como:
Mejorar la circulación
El agua tibia de un jacuzzi dilata los vasos sanguíneos, lo que mejora la circulación y reduce la presión arterial.
Aliviar la tensión muscular
Los jets de hidromasaje ayudan a relajar los músculos y a reducir la inflamación articular.
Reducir el estrés y la ansiedad
El agua caliente y los chorros del hidromasaje pueden ayudar a reducir el estrés mental y físico.
Mejorar la calidad del sueño
El agua caliente puede ayudar a combatir el insomnio y a facilitar el sueño.
Aliviar el dolor de algunas dolencias
Los jacuzzis pueden ayudar a aliviar el dolor de algunas enfermedades como la artritis, el túnel carpiano o la tendinitis.
Mejorar el drenaje linfático
Las burbujas y el agua caliente del jacuzzi ayudan a mejorar el drenaje linfático.
Aumentar las proteínas de choque térmico
El calor pasivo del jacuzzi aumenta los niveles de proteínas de choque térmico, lo que puede mejorar el control de azúcar en sangre.
Quemar calorías